martes, 20 de septiembre de 2016

Reseña: El tiempo es el que es - Anaïs Shaaff / Javier Pascual






FICHA
Titulo: El tiempo es el que es (El ministerio del tiempo)
Autor: Anaïs Schaaff y  Javier Pascual
  • Nº de páginas: 312
  • Editorial: Plaza & Janés

En la biblioteca de un convento, alguien fotografía un códice del siglo VIII. Pasando páginas, llega a una en la que con caligrafía moderna se lee: «Me llamo Elías Sotoca y estoy atrapado en el año 780». Cuando la noticia llega al Ministerio del Tiempo, la sorpresa es total. Sotoca es un agente de alto nivel al que se dio por desaparecido hace años. Amelia, Alonso y Julián parten de inmediato hacia 780 para rescatar al compañero perdido.

Tras la misión en el medievo, la patrulla acaba por error en Cartagena de Indias, uno de los puertos más importantes de la época colonial, en el año 1603. Allí deben convencer al capitán de uno de los galeones de que les permita embarcar, como paso previo para regresar a 2016. Pero entonces conocerán a un personaje histórico que sobrevive en el anonimato y que deberán salvar para que la historia no cambie.

Cuando parece que todo ha terminado, se produce una emergencia que requiere la inmediata participación de los agentes; con apenas 20 años, Lola Mendieta que aún no ha ingresado en el Ministerio es detenida por los nazis en Canfranc. ¿El motivo? Ser espía de las fuerzas aliadas en la Segunda Guerra Mundial. Lo que en principio parece una sencilla misión de rescate se complicará hasta el punto de que la victoria final de los aliados sobre los nazis se ponga en peligro.

Tres misiones. Tres épocas. Y un sinfín de aventuras con el personaje de Lola Mendieta como leitmotiv entre ellas. Bienvenidos a la primera novela de El Ministerio del Tiempo titulada, como no podía ser de otra manera, El tiempo es el que es.
Hacía tiempo que tenía esta serie en pendientes, había leído que era algo similar a Doctor Who, serie que me encanta, así que tenía que ver como era esta. 

Cuando la empecé a ver me enganché totalmente. Vi la primera temporada en menos de una semana. Sobre mitad de la segunda, un día mirando libros en Carrefour mi novio encontró que había un libro del Ministerio del tiempo, pensaba que sería un libro explicativo de como crearon la serie o cosas por el estilo por lo que no hice mucho caso ni investigué de que tipo de libro se trataba.
Hace apenas unos días se lo compró él. Me lo enseñó y seguía aún pensando que era una tontería, no sabía que era como la serie, que contaba una historia. 



Julián tenía buen olfato y conocía de primera mano el olor de las enfermedades. [...] La hepatitis huele a pescado crudo; la diabetes, a acetona; la fiebre tifoidea, a pan recién horneado, y la fiebre amarilla, a carnicería.








En verdad es que ni me había preocupado por leer la sinopsis... Así que cuando lo hice y vi que no solo contaba una historia si no que eran tres le dije que me lo tenía que dejar.

El resultado fue que me lo leí en poco más de dos tardes. Es totalmente adictivo. Si te gusta la serie el libro te va a encantar. Es exactamente igual que un capítulo. A pesar de ser leído te imaginas las caras de los personajes en cada situación, la de Alonso en situaciones que no entiende debido a ser "más modernas que él", la de Amelia cuando esta pensando como proceder en la misión  y sobretodo, la de Julián cuando hace gracias que solo él puede entender y los otros dos le miran sin saber porque lo ve gracioso.


- Pero ¡si llevan un muerto ahí metido!
- Buenas tardes buen hombre - dijo -. Venimos a enterrar a nuestro padre. Es que se ha muerto esta mañana, ¿sabe?
- ¿Y la alfombra? ¿Qué hace dentro de una alfombra?
- Es que era su favorita - respondió Julián -. Y su... su última voluntad fue que le enterrásemos con ella. - No podía creerse lo malo que era improvisando.











La novela resulta igual de divertida y entretenida que la serie. Si te gusta, no dudes en leerlo, no te va a decepcionar. Si nunca has visto la serie puede algunas cosas no las entiendas de la misma forma, pero probablemente aún así vale la pena leerlo.



- Jamás te faltarán flores frescas, John. Te lo juro.
Y así fue.
Incluso después de la muerte del matrimonio onubense, su hija mayor siguió con la tradición de llevar flores todas las semanas hasta el día de hoy. Y sus hijos harán lo propio el día en que falte ella.